Feliz miércoles amigos. Hoy venimos cargados de la energía que nos dan el azúcar y el chocolate que hemos empleado en nuestra receta de hoy: unos apetitosos brownies de chocolate. Nuestra propuesta de brownies es una receta con galletas. Elaboraremos nuestros deliciosos brownies con galletas de sésamo. Os aconsejamos que os animéis con esta original receta de muy fácil elaboración. Al comer nuestros brownies, nos irán apareciendo pequeños trozos de galletas crujientes, una delicia gastronómica.
Si queréis conocer las diferentes leyendas sobre el
origen de los brownies, no dejéis de leer nuestra receta de
Brownies Gourmet, unos brownies con un toque de amor. Aquí os dejamos un adelanto de nuestra receta de brownies de chocolate. Esperamos que disfrutéis con ella...
Curiosidades Gastronómicas... El
sésamo (en árabe simsim) es uno de los cultivos más longevos de la humanidad. Se trata de una planta muy apreciada por todas las propiedades nutritivas que posee. Sus semillas se llaman
ajonjoli. En la tumba del
faraón Ramses III se encuentran unas indicaciones sobre el uso culinario del sésamo, hablamos del siglo XIII antes de cristo amigos... Y será precisamente el sésamo un ingrediente fundamental en nuestra receta de brownies de chocolate, nuestra peculiar
receta con galletas de sésamo.
El sésamo representa, para la tradición hindú, el principio de la vida. ¿Y cuál es su origen? Bien pues aquí nos enfrentamos, como de costumbre, a un origen discutido. Hay quien asegura que la procedencia del sésamo está en Oceanía, de donde pasó a la India y posteriormente a Egipto. Sin embargo, hay quien asegura que su origen está en el Himalaya. Pero, como no hay dos sin tres, hay quien defiende un tercer origen: África. Los esclavos africanos que fueron trasladados a América, llevaron las semillas de sésamo consigo, ya que era un plato básico en su alimentación.
¡Ábrete sésamo! Todos habremos escuchado esta frase en alguna ocasión pero, ¿sabemos su origen? Ya sabéis que en
Cuisíname somos muy, pero que muy curiosos... "Ábrete sésamo" (en árabe: "iftah ya simsim") son las palabras mágicas que conseguían abrir la cueva de los 40 ladrones en el cuento de aventuras "Alí Babá y los cuarenta ladrones", perteneciente a
Las mil y una noches. Cuenta la narración que Alí, un leñador de Arabia, descubrió por casualidad la cueva de los 40 ladrones, los pilló
in fraganti mientras estos escondían sus tesoros. Una vez los ladrones hubieron marchado y sabiendo Alí la archiconocida contraseña, no se lo pensó dos veces, y entró en la cueva de los 40 ladrones a llevarse parte del tesoro. La cueva se abría a la orden de "
Ábrete Sésamo" y se cerraba con las palabras "Ciérrate Sésamo". ¿Y por qué emplearon la palabra
"sésamo"? Hay varias teorías al respecto. Hay quien afirma que se empleó esa palabra por el simple hecho de que el sésamo era un alimento muy presente en la gastronomía árabe. También hay quien nos cuenta que la cueva llevaba por nombre sésamo por lo que esta planta representaba. El sésamo tiene muchas cualidad nutritivas, si lo consumimos beneficiamos nuestro sistema nervioso y conseguimos
abrir nuestra mente y con ello nuestra intuición para entrar en la
cueva oculta de los 40 ladrones, o en cualquier otra cueva con la que nos tropecemos en la vida. Nos han explicado un tercer origen: el estallido y la facilidad con los que los frutos maduros del sésamo se abren, como la puerta de la cueva de los 40 ladrones.
¿Eres curioso?